El Descenso Internacional del Sella tiene sus raíces en una travesía pionera realizada en 1930 por Dionisio de la Huerta y un grupo de amigos, quienes decidieron explorar las aguas del río Sella en canoa. Este evento inicial sentó las bases para lo que se convertiría en una de las competiciones de piragüismo más destacadas del mundo. 

En 1932, se establecieron oficialmente la salida en Arriondas y la meta en Ribadesella, celebrándose la primera edición con carácter competitivo, en la que participaron trece palistas provenientes de Oviedo, Gijón, Ribadesella e Infiesto. 

Sin embargo, entre 1936 y 1943, el Descenso del Sella no se celebró debido a la Guerra Civil Española y la posterior posguerra. La competición se reanudó el 11 de agosto de 1944, con la participación de once piraguas. 

El evento adquirió carácter internacional en 1951, cuando por primera vez participaron competidores extranjeros. En 1955, se inscribió el primer equipo de otro continente, procedente de Cuba.

Hoy en día, el Descenso Internacional del Sella es una de las competiciones de piragüismo más importantes del mundo, atrayendo a miles de participantes y espectadores cada año.